La mirada de los otros posiblemente también sea la mía.

8.11.05

nada

¿Qué hacer cuando los recuerdos del pasado llenan nuestra mente? La respuesta es simple: nada. No los sigamos, los rechacemos o nos impliquemos en ellos. Observémolos tal como son. Veamos el recuerdo como recuerdo, el pensamiento como pensamiento; observémolos sin apegarnos a ellos. De este modo no nos veremos influenciados o condicionados por ellos, y gradualmente, a la vez debilitaremos el hábito de vivir en el pasado y oscurecer el presente con éste.

Autor: Dhiravamsa "La via del no apego"

3 comentarios:

Joselu dijo...

Es lo mismo que decir que los recuerdos y los pensamientos no tienen sustancia, no tienen noumeno. Sin embargo, los recuerdos fueron en su momento realidad. Aquello tuvo lugar y vuelves sobre ello. Los novelistas lo hacen permanentemente para exorcizar el pasado. Lo evocan, lo traen a sí para observarlo y revivirlo. Es difícil desprenderse del pasado y más de los pensamientos. A veces son espirales obsesivas, bloquean el funcionamiento del cerebro, lo condicionan.

clevus dijo...

Sí,supongo que pueden coexistir los dos aspectos.
Justamente hoy he estado leyendo algunas poesías y he comprobado esto que comentas... supongo que todo debe depender del momento, de lo que se te presente de forma natural.Con todo cuando estas reviviendo el pasado seguramente ya no eres exactamamente la misma persona...quizás ahora no responderías de la misma manera y también lo estás analizado con ojos diferentes... no sé...

Anónimo dijo...

Hey clevus, I couldn't agree with your post (nada) more. Check out my site: texas deer hunting

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